Bobo, Jacinto
Bobo. Con este nombre -así, a lo James Bond- se ha colado en el mundo del
espectáculo este sevillano-alanisense licenciado en Comunicación Audiovisual
y Máster en Artes del Espectáculo.
Después de
pasar 20 años en la cárcel, el célebre ladrón de chalets Juan "el Candela",
sale en libertad y se reúne con su hijo Juan “el Chispa” y su amigo Cristo.
Mientras que "el Candela" intenta adaptarse al nuevo mundo con el que se
encuentra, su hijo planea conseguir dinero para cumplir su sueño musical,
utilizando a su padre como referencia. Esta es la sinopsis de "Obra 67", la
película que se estrena hoy en cines de toda España dirigida por David Sainz
y protagonizada por Antonio Dechent, Alvaro Pérez, Daniel Mantero, Ken
Appledorn, Ricardo Mena y Jacinto Bobo, a los que les deseo el mayor de los
éxitos, especialmente a mi sobrino Jacinto (@jacintobobo) que, al elegir entre los colores
deportivos de su padre (mi primo) y de su madre, Pilar, se decantó
acertadamente por los del lado materno.
Pese a su
insultante juventud, estos pasos no son los primeros:
Los cortos
“Grupo 7”, “El Curioso Caso del Corredor Paulatino”, “Plan de Fuga” y “La
Historia del Prima David” son sus antecedentes en el cine. Entre bambalinas:
“A quién le importa. El musical”, “Teatro a Pelo”, “ El pequeño Eyolf”...
además de series exitosas como "Malviviendo", “Flaman”, “La respuesta está
en la historia” o “Hasta el final”.
Ni sevillismo ni beticismo, sornas aparte: si Jacinto Bobo es capaz -ya lo hace- de derrochar en talento en el mundillo audiovisual la mitad de su talla como persona -de casta le viene al galgo-, el Goya está asegurado y el Oscar... pues lo mismo.
Ni sevillismo ni beticismo, sornas aparte: si Jacinto Bobo es capaz -ya lo hace- de derrochar en talento en el mundillo audiovisual la mitad de su talla como persona -de casta le viene al galgo-, el Goya está asegurado y el Oscar... pues lo mismo.
Enhorabuena al
protagonista y a sus orgullosos padres y un recuerdo en estos momentos
previos al estrellato para sus abuelos, especialmente para mi recordada tía
Magdalena. ¡Cuánto hubiera disfrutado!
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